Mi valoración: 1 sobre 5
Lisbeth Salander está inquieta. Ha participado en un ataque hacker sin razón aparente y está asumiendo riesgos que normalmente evitaría. Mientras, la revista Millennium ha cambiado de propietarios. Quienes le critican, insisten en que Mikael Blomkvist ya es historia.
Una noche, Blomkvist recibe la llamada del profesor Frans Balder, un eminente investigador especializado en Inteligencia Artificial quien afirma tener en su poder información vital para el servicio de inteligencia norteamericano. Su as en la manga es una joven rebelde, un bicho raro que se parece mucho a alguien a quien Blomkvist conoce demasiado bien.
Mikael siente que esa puede ser la exclusiva que él y Millennium tanto necesitan, pero Lisbeth Salander, como siempre, tiene sus propios planes.
Lo he abandonado tras leer un cuarto del libro, y me parece que demasiado aguanté (porque apareció Lisbeth y todo eso). Me dijeron que estaba muy bien, que el escritor había imitado bien al autor original pero no me ha parecido nada de eso. No me ha enganchado en ningún momento, se me ha hecho farragoso y lioso desde el principio y no cambió hasta el momento en que dejé de leerlo. Definitivamente, para mí la saga Millenium acaba en el tercero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario